Muchos de nosotros admitiremos que somos golosos, pero el exceso de azúcar se ha relacionado fuertemente con la obesidad y muchos otros problemas de salud tanto en adultos como en niños.
Reducir el azúcar puede ser más fácil decirlo que hacerlo, pero es importante que no permita que sus hijos consuman demasiado y que adquieran buenos hábitos desde el principio de su vida.
Estos son algunos de nuestros mejores consejos sobre cómo puede limitar la cantidad de azúcar en la dieta de su pequeño.
Bebidas gaseosas y jugos
Sus hijos realmente deberían beber principalmente agua y leche. Las bebidas gaseosas son malas tanto para niños como para adultos, y por lo general están llenas de saborizantes y edulcorantes artificiales. Si bien los jugos de frutas pueden parecer una alternativa saludable, normalmente están desprovistos de fibras beneficiosas y contienen una cantidad mucho mayor de azúcar que las piezas enteras de fruta.
Recomendamos guardar jugos de frutas o cordiales para ocasiones especiales, o una vez al día solo en la cena. Si tiene un bebedor quisquilloso en su familia, la clave del éxito es la paciencia. Comience por diluir las bebidas de su pequeño y eventualmente ¡comenzará a disfrutar del agua potable!
CONSEJO PRINCIPAL: asegúrese de tener muchos vasos y popotes divertidos para que sea más emocionante para ellos; se olvidarán por completo de que es solo agua.
Recompensa con comida
¿Con qué frecuencia recompensamos a nuestros hijos (y a nosotros mismos) con golosinas azucaradas cuando se han portado bien? Puede parecer una buena idea en ese momento, pero usar alimentos poco saludables como recompensa puede tener un impacto negativo en la relación de su hijo con la comida. Trate de usar otras cosas como actividades divertidas los fines de semana o en la noche cuando hayan sido buenas y guarde las golosinas azucaradas para los fines de semana u ocasiones especiales.
Prepárate
A veces, buscar en el armario de bocadillos es la forma más fácil de salir cuando su pequeño está pidiendo comida a gritos. Estar abastecido de alternativas más saludables es otra excelente manera de reducir la tentación de los refrigerios azucarados. Recuerde, el azúcar no mantendrá a su pequeño lleno por mucho tiempo y puede provocar rabietas alimentadas por el azúcar: lo que su cuerpo realmente necesita es proteína. Asegúrate de estar siempre bien equipado con cosas como manzanas, plátanos, queso y cualquier refrigerio casero que esté repleto de cosas como avena y granos, ¡especialmente cuando estés fuera de casa!
Diviértete
No haga que la alimentación saludable parezca una tarea para usted o su hijo, de lo contrario, esa será la realidad. Haz que se entusiasmen y haz que se sientan involucrados usando colores brillantes y divertidos y técnicas divertidas de preparación. Puede cortar sus verduras en pequeños erizos, hacer brochetas de kebab saludables e incluso puede ser emocionante preparar ensaladas de frutas con sus hijos. ¡Recuerde, no haga que el azúcar sea el enemigo, ya que solo hará que sus hijos lo deseen más!
Sé honesto y educado
Cuando tu pequeño tenga la edad suficiente para entender correctamente, sé honesto y educa a tu hijo sobre POR QUÉ comer tanta azúcar no es saludable para ti, destacando los beneficios de una dieta más sana y equilibrada. Evite los refuerzos negativos como "te hará engordar" y, en cambio, explícale que es importante que comamos más ciertos tipos de alimentos que otros. ¡Las afirmaciones positivas como "esto ayudará a que tus huesos crezcan y se desarrollen" o "este alimento te dará mucha energía para jugar en el parque hoy" quedarán mucho mejor!
El entorno adecuado
Crear un ambiente sano y tranquilo a la hora de comer puede ser muy beneficioso. Puede ser una oportunidad para que se unan como familia, así que trate de no dejar que consuman su comida sin pensar mientras ven la televisión tanto como pueda. La Childhome Evolu One.80° Chair de CuddleCo es la trona perfecta para usar una vez que su bebé pueda sentarse sin ayuda. Es adecuado para cualquier niño de entre seis meses y seis años y se puede ajustar fácilmente en tres posiciones sin necesidad de mover toda la silla, ¡haciendo que las comidas sean mucho más fáciles para los padres!
Así que recuerde, no se asuste por el uso de refrigerios saludables como una alternativa al azúcar: es posible que su pequeño adopte una alimentación saludable mucho más fácil de lo que pensaba.